03 Ago ¿Por qué mis clientes no reciben mis emails?
El email marketing ha sido y seguirá siendo por mucho tiempo una de las vías de comunicación más eficientes con tus potenciales clientes.
Como ya comentamos en nuestro artículo sobre lead nurturing, a través del email podemos desarrollar una relación de confianza con nuestra base de datos de suscriptores, posicionándonos como un referente de nuestro sector, y aumentando las probabilidades de que nuestros lectores se acuerden de nosotros cuando finalmente estén preparados para adquirir nuestro producto o servicio.
Sin embargo, muchas de las empresas con las que tratamos habitualmente nos comentan que tienen un problema a la hora de llegar a sus clientes a través de email. El típico comentario es: «Sí, nosotros enviamos emails masivos a toda nuestra base de datos, pero casi nadie nos abre los emails. Sospecho que acaban en la bandeja de spam».
La problemática que surge a la hora de enviar emails a tu lista de suscriptores recibe el nombre de deliverability en inglés, o entregabilidad en español.
La importancia de la entregabilidad en los emails
El objetivo de lanzar una campaña de comunicación por email no sólo es que abran tu correo el mayor número de usuarios posible; también quieres que estos usuarios hagan clic en los enlaces que incluyes en tu correo, o realicen la acción que quieres que hagan en ese email.
Pero si tus emails acaban en la bandeja de spam, probablemente pasen totalmente desapercibidos para tus lectores, por lo que todo tu esfuerzo será en vano.
Por eso es importante seguir una serie de consejos para garantizar la entregabilidad, esto es, la probabilidad de que tus emails sean entregados a tus lectores directamente a su bandeja de entrada.
La entregabilidad no es un atajo secreto que te lleva directamente a la bandeja de entrada a tus suscriptores, ni un modo de engañar a Google para que no te ponga en la pestaña de Promociones, o de Spam.
La entregabilidad es una serie de buenas prácticas que te ayudarán a llegar al mayor porcentaje posible de suscriptores de tu lista.
Si no sigues estas buenas prácticas, la reputación de tu marca puede verse afectada, y con ella todos los futuros envíos que pretendas llevar a cabo desde tus correos corporativos.
Cómo asegurarte de que tus suscriptores reciben tus emails
A continuación, vamos a desglosar las buenas prácticas en el envío de emails en dos apartados: lo que debes de hacer antes de proceder con el envío, y lo que has de hacer después del envío.
Antes del envío
Elegir el servicio correcto de email marketing
Algunos directivos con poca experiencia en el envío de emails confiesan haber realizado campañas de email marketing usando su propio servidor de correo electrónico (Gmail o similar), añadiendo a todos los contactos posibles en el campo CC.
¡Mucho cuidado con eso! El envío masivo de emails a través de correos particulares puede ser motivo suficiente para que tu servidor te califique como spammer, y envíe directamente todo lo que envías a la bandeja de spam.
Pero lo más grave de realizar así tus envíos es no usar el campo CCo, y permitir que cualquier recipiente del email vea el resto de direcciones. Esto es una violación de privacidad, y la Agencia Española de Protección de Datos prevé multas cuantiosas a las empresas que realicen este tipo de envíos.
La manera correcta de realizar envíos corporativos de email es contratando un servicio de email marketing. Dicho servicio consiste en la contratación de un servidor que realiza los envíos por ti – usando tu correo corporativo si así lo deseas -, gestiona tu lista de suscriptores y genera informes sobre el resultado de cada campaña.
Hoy en día existen muchos proveedores de este servicio, y nuestra recomendación es elegir uno que tenga los servidores en Europa, y que ofrezca la posibilidad de realizar envíos gratuitos con listas pequeñas.
En ese sentido, Acumbamail es nuestro servicio de email marketing de confianza; nos gusta especialmente la facilidad con la que se construyen los formularios y las plantillas de correo. Acumbamail cuenta con versión gratuita, pero si te suscribes desde este enlace, obtendrás 10 € de descuento en cualquiera de sus planes de pago.
Analizar tu lista de correo
Una lista de correo bien organizada y saneada es el pilar fundamental de una buena estrategia de email marketing.
Así que antes de realizar cualquier envío, analiza tu lista y pregúntate lo siguiente:
- ¿De dónde proceden estos suscriptores?
Tu lista de suscriptores tiene que estar formada por personas que voluntariamente decidieron suscribirse a tu lista a través de un formulario en tu web.
Cualquier otro método de añadir suscriptores a tu lista – antiguos contactos, listas compradas – es ILEGAL, y puede suponer sanciones de hasta 600.000 €.
Así te sentirás cuando recibas una multa de la AEPD por comprar listas de correo.
Ten cuidado especialmente con las listas compradas, ya que los servidores de correo saben identificar a la perfección cuándo una lista es comprada, y eso puede suponer que bloqueen todos tus envíos futuros.
- ¿Te han dado permiso para enviarles emails?
Cuando un usuario rellena un formulario de contacto en tu web, o hace un comentario en tu blog, eso no significa que automáticamente te esté dando su permiso para recibir correos electrónicos promocionales.
No es suficiente con incluir una cláusula en tu política de privacidad que advierta de la suscripción automática. Aquí estamos hablando de ir más allá de lo establecido legalmente.
¿Estás seguro de que dejas bien claro a tus usuarios el hecho de que se están suscribiendo a tu lista de correo? ¿Saben lo que van a recibir, esperan recibir correos tuyos?
Si no es así, estás gestionando las expectativas de tus usuarios de la manera incorrecta, y es posible que recibas quejas o se te den de baja los usuarios cuando realices tus envíos.
En este sentido funcionan muy bien los sistemas que te permiten el doble opt-in, es decir, que cuando el usuario rellena el formulario para inscribirse, justo después le llega un email para que confirme la suscripción. Así evitas suscripciones accidentales, y te aseguras que los usuarios te conocen y saben por qué les envías correos.
Después del envío
Al igual que en cualquier estrategia de marketing, después de realizar una campaña de email es necesario recurrir a la analítica, para descubrir en qué aspectos podemos mejorar nuestros futuros envíos.
A continuación vamos a hablar tanto de las métricas positivas, las que indican cómo de exitosa ha sido tu campaña, como de las negativas.
Métricas positivas del envío
Las principales métricas en las que te debes fijar a la hora de analizar el resultado de tu campaña de email marketing son: tasa de apertura y clics.
La tasa de apertura te ayudará a conocer cuántos de tus suscriptores abrieron tu correo. Ten en cuenta que algunos servidores de correo no cuentan como apertura si el usuario no hace clic en el botón de «descargar todas las imágenes», por lo que este porcentaje puede ser algo mayor en la realidad.
El número de veces que un usuario ha hecho clic en un enlace que hayas incluido en tu correo también es muy importante. Analiza quién ha hecho clic, cuántas veces y en qué enlaces. Y si detectas muchos clics en enlaces poco relevantes para ti, plantéate la posibilidad de eliminar dichos enlaces de tus correos.
Métricas negativas del envío
Cuando realizas un envío a una dirección de correo determinada, pueden ocurrir tres cosas que quieres evitar en la medida de lo posible:
- que el suscriptor se dé de baja: puede ser porque el suscriptor no se esperaba recibir tu email, o porque lo que en él cuentas no tiene valor para él.
- que el email nunca le llegue (bounce): los servidores de correo rechazan a diario determinados emails, ya sea por problemas de reputación del remitente como por problemas con el contenido del email.
- que el suscriptor marque tu correo como spam: cuando tu suscriptor no se conforma con sólo darse de baja y además de ello, te reporta como spammer, es una señal de que tu comunicación por email no le gusta nada.
Si te ocurre alguno de estos casos, debes analizar la causa, y tomar las medidas pertinentes para que no te vuelva a ocurrir en un futuro.
En un próximo post, hablaremos de los motivos por los que tu email rebota de los servidores de correo (bounce), y te daremos consejos para evitar que esto pase.
Siguiendo todas estas prácticas, te asegurarás de mejorar tu reputación como remitente de correos con el tiempo, y cada vez más clientes recibirán tus emails y tomarán acción gracias a ello.
¿Has tenido alguna vez problemas enviando emails a tus clientes? ¡Cuéntanoslo en los comentarios!
No Comments